jueves, 15 de octubre de 2015

Cómo ganarse la vida dando conferencias

 Por Amancio E. Ojeda Saavedra.

¿Qué se necesita para ser un conferencista? Esta pregunta me la hacen con más frecuencia de lo que yo  esperaría; que sea tan repetida, significa que la gente tiene interés en ser un buen orador y, además,  vivir la experiencia de pararse ante un público  y  generar impacto en la vida de quienes tiene delante.  

Antes de responder lo que se necesita, me gustaría presentar tres (3) puntos que juzgo valiosos y  relevantes sobre este tema, me refiero  a: 

1.- Sobre la palabra correcta, la Real Academia Española aclara que la palabra "conferencista" es de uso común en América, pero la palabra aceptada y  la cual define  de manera clara es "Conferenciante", al texto dice: "(De conferenciar). Persona que diserta en público sobre algún punto doctrinal".

2.- Una cosa es ser conferenciante, y otra muy distinta es ser facilitador de procesos de aprendizaje o docente de aula, los objetivos de la intervención tienen diferentes sentidos. Sin que un rol sea excluyente del otro.

3.-  Una cosa es dar una conferencia ocasionalmente  y otra cosa muy diferente es vivir de dar conferencias.

Los puntos anteriores son necesarios para comprender unas diferencias básicas, las cuales me dejan un terreno más llano para responder a la interrogante;  así, pues, me permito  hacer una lista de aquellas cosas que se requieren para ser un conferenciante.

a) Tener algo  que decir: Se necesita que la persona tenga un tema el cual domine con confianza y  que le permita presentar un contenido  de  interés para un grupo  de  personas. Es importante que el conferenciante evite ser "un repetidor" de los conceptos e ideas de otros; le corresponde desarrollar en el tema la profundidad intelectual y la experiencia necesaria,  para crear sus propias ideas sobre "las verdades" que defiende, y no parecer "la copia hablada" de un libro (al menos que sea el autor).   

b) Deseos de servir: Un conferenciante que está ante un público es un servidor,  y ha sido llamado  para nutrir las mentes y los corazones de quienes le ven,  escuchan y sienten.

c) Confianza en sí mismo: Esto es necesario para danzar con situaciones que pueden desafiar su autocontrol y  con ello los resultados de su presentación.

d) Capacidad de síntesis y adaptación: Para poder de manera diáfana entregar en el tiempo asignado, la mayor información posible, dejando el apetito abierto a su audiencia para se haga cargo  de investigar más. Así mismo, estar dispuesto a adaptar su discurso y presentación a la audiencia, cosa en muchas ocasiones requiere investigación y tiempo.  

e) Pasión por la gente: Para que desde ese rol comunique lo mucho  que disfruta el estar sirviendo, y  la congruencia le permita hacer la conexión  emocional necesaria que brinde confianza a los presentes.

f) Competencias de comunicador: Estas son habilidades que se aprenden,  tienen relación con elementos como: voz, dicción, emocionalidad del discurso, corporalidad, diseño de los contenidos, elaboración profesional de  la presentación visual, diseñar la apertura, desarrollo, clímax, reflexión y cierre de cada conferencia, entre otros. 

g) Desarrollar su marca personal: Definir con claridad cómo quiere ser percibido por el mercado, hacer lo necesario para mostrarse, mercadearse, y vender su trabajo.   

Creo que un camino  para llegar a ser un conferenciante de buen nivel, comienza por descubrirse como facilitador y  su gran potencial, comenzando con grupos pequeños y luego para grandes audiencias.

Esta es sin duda una carrera apetecida, y muchos son atraídos por la vanidad del reconocimiento público y los aplausos; pero quienes hacen de esto una profesión de altura, muestran un interés constante por su desarrollo personal y profesional, tienen altas dosis de humildad, y descubren prontamente que "lo que alimenta al  becerro no  es la vaca, sino su leche" por ello, cada día trabajan porque la calidad de su mensaje sea el protagonista de su trabajo.  Y a ti, ¿te gustaría ser un conferenciante?


@amanciojeda
www.amanciojeda.com
amancio@alianzasdeaprendizaje.com
Tomado de El Universal (Caracas, Venezuela). 15 de octubre de 2015.