En la definición de oratoria en el Tema 1, decíamos
que el discurso es el razonamiento pronunciado en público con el fin
de convencer a los oyentes o mover su ánimo. Esta es una definición orientada a
los objetivos de un líder político, del debate legislativo, de la confrontación
de ideas, donde el objetivo primordial es modificar posiciones, sumar
respaldos, atraer personas a su causa. Estos objetivos difieren un poco de los
que se propone un docente, un locutor o un sacerdote, por citar algunos. Pero
aun considerando estas sutiles diferencias, admitamos que en el fondo, todos
buscan persuadir a su público, para cual deben cumplir los pasos que hemos expuesto
en los temas vistos hasta hoy.
El problema es que toda la preparación, las
prácticas y los pasos previos al discurso serán inútiles si antes de culminar
nuestra disertación “perdemos” la voz. La disfonía o la afonía que sufre una persona
en pleno discurso, generalmente hacia su culminación, echa por tierra todo el
trabajo de preparación; diluye el mensaje; borra la imagen de liderazgo del
orador y toda la fuerza que haya podido transmitir minutos antes. Eso no
representa un problema con respecto a la mayoría de los seguidores del líder,
que no cambiarán su preferencia por una disfonía que seguro justificarán. El
hecho es que un líder político no busca convencer a sus seguidores, estos ya
están ganados a su causa: lo que busca es sumar personas, convencer a los
indecisos, incluso a seguidores de sus adversarios, pero con un discurso que
termina sin nitidez, con una voz ronca que luce forzada, no logrará ningún
nuevo respaldo e incluso, restará algunos.
La mejor manera de prevenir las patologías de la voz, incluyendo la afonía y la disfonía, es la prudencia y la práctica sistemática de los ejercicios adecuados. A continuación indicamos un conjunto de reglas sencillas que permitirán minimizar las posibilidades de sufrir afecciones en los órganos involucrados en la producción de la voz. Sígalas al pie de la letra y en poco tiempo observará excelentes resultados.
1°. Acuda al médico especialista (Foniatra) por lo menos una vez al año para que efectúe un chequeo rutinario. Aunque no sienta ninguna afección.
2°. Consuma bebidas con temperatura ambiental. Jamás beba algo frío antes de hablar en público, ni mucho menos durante su disertación. Si la vida social le impone el consumo de bebidas frías, trate de hablar lo menos que pueda y con intensidad moderada. Evite cantar en reuniones sociales.
3°. Realice siempre un calentamiento vocal previo a su intervención oral (los indicamos en el Manual de Oratoria).
4°. Nunca realice ejercicios vocales o respiratorios inmediatamente después de comer. Espere por lo menos dos horas.
5°. En la medida de lo posible, no combine profesionalmente la voz hablada y cantada.
6°. Si siente alguna afección como laringitis, disfonía, catarro, etcétera, guarde reposo vocal absoluto y acuda al médico lo antes posible.
7°. Mantenga un régimen alimentario lo más sano posible, rico en vitaminas A, A1, y B12. Disminuya el consumo de condimentos y consuma tantos vegetales como pueda.
8°. Evite los cambios bruscos de temperatura. Use el aire acondicionado con moderación (temperatura “fresca”)
9°. No exagere al momento de abrigarse. El cuerpo humano es capaz de adaptarse muy bien a las condiciones del ambiente. Mantenga su habitación ventilada, de ser posible, durante la noche.
10°. Si le es posible, elimine el consumo de alcohol.
11°. En relación con el tabaco McCallion dice: …“si tienes intención de dejar de fumar, es mejor hacerlo mientras no estás trabajando. La mayoría de los fumadores que lo dejan atraviesan un período de ajuste vocal durante el cual la voz suele sonar peor que antes. Finalmente (…) la voz retoma su claridad y (…) mejora mucho.” McCALLION, Michel. “El Libro de la Voz” P. 293
12°. Evite el trasnocho. Es recomendable dormir por lo menos siete horas diarias. Mejor si se inician temprano en la noche (entre las 20:00 y las 22:00 h)
13°. Los perfumes y el aroma de las flores son peligrosos para la voz. Use los perfumes con moderación y en lo posible evite ambientes con olores fuertes.
La mejor manera de prevenir las patologías de la voz, incluyendo la afonía y la disfonía, es la prudencia y la práctica sistemática de los ejercicios adecuados. A continuación indicamos un conjunto de reglas sencillas que permitirán minimizar las posibilidades de sufrir afecciones en los órganos involucrados en la producción de la voz. Sígalas al pie de la letra y en poco tiempo observará excelentes resultados.
1°. Acuda al médico especialista (Foniatra) por lo menos una vez al año para que efectúe un chequeo rutinario. Aunque no sienta ninguna afección.
2°. Consuma bebidas con temperatura ambiental. Jamás beba algo frío antes de hablar en público, ni mucho menos durante su disertación. Si la vida social le impone el consumo de bebidas frías, trate de hablar lo menos que pueda y con intensidad moderada. Evite cantar en reuniones sociales.
3°. Realice siempre un calentamiento vocal previo a su intervención oral (los indicamos en el Manual de Oratoria).
4°. Nunca realice ejercicios vocales o respiratorios inmediatamente después de comer. Espere por lo menos dos horas.
5°. En la medida de lo posible, no combine profesionalmente la voz hablada y cantada.
6°. Si siente alguna afección como laringitis, disfonía, catarro, etcétera, guarde reposo vocal absoluto y acuda al médico lo antes posible.
7°. Mantenga un régimen alimentario lo más sano posible, rico en vitaminas A, A1, y B12. Disminuya el consumo de condimentos y consuma tantos vegetales como pueda.
8°. Evite los cambios bruscos de temperatura. Use el aire acondicionado con moderación (temperatura “fresca”)
9°. No exagere al momento de abrigarse. El cuerpo humano es capaz de adaptarse muy bien a las condiciones del ambiente. Mantenga su habitación ventilada, de ser posible, durante la noche.
10°. Si le es posible, elimine el consumo de alcohol.
11°. En relación con el tabaco McCallion dice: …“si tienes intención de dejar de fumar, es mejor hacerlo mientras no estás trabajando. La mayoría de los fumadores que lo dejan atraviesan un período de ajuste vocal durante el cual la voz suele sonar peor que antes. Finalmente (…) la voz retoma su claridad y (…) mejora mucho.” McCALLION, Michel. “El Libro de la Voz” P. 293
12°. Evite el trasnocho. Es recomendable dormir por lo menos siete horas diarias. Mejor si se inician temprano en la noche (entre las 20:00 y las 22:00 h)
13°. Los perfumes y el aroma de las flores son peligrosos para la voz. Use los perfumes con moderación y en lo posible evite ambientes con olores fuertes.
Óscar Manuel Romero.
Gracias
ResponderEliminargracias pero no se puede copiar
ResponderEliminarsi se pudiera copiar porfas
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