lunes, 9 de enero de 2012

Vicios de dicción

Los Vicios de Dicción son defectos en el uso del idioma que pueden observarse al hablar (pronunciación) y al escribir (morfología). Muchas veces los cometemos de manera inconsciente aun cuando conocemos la forma correcta de decir o escribir la frase o la palabra objeto del error. Si esto ocurre durante una disertación no modifique la actitud de seguridad que ha venido mostrando en su intervención, no se “descomponga” ni pida perdón o disculpas, simplemente diga a continuación el vocablo correcto y continúe como si nada hubiera pasado. Si lo desea puede agregar previamente “quise decir”; “mejor dicho” etcétera. Lo verdaderamente importante es que su auditorio le vea continuar sin darle mayor importancia al hecho de que se equivocó. Veamos algunos vicios de dicción.

Solecismos:
Es una alteración en la sintaxis o en el uso correcto del idioma. Entre los solecismos destacan las incorrecciones y los equívocos.

En el primer caso tenemos el empleo abusivo de palabras, especialmente de los relativos que, cual, quien, cuyo: “La camisa que compré, que tiene dos bolsillos que me gustan, es más bonita que la que está en la tienda que inauguraron en la calle que está cerca de mi casa.” (Exageración nuestra)

Otro tipo de incorrección es la sustitución, omisión o mal uso de pronombres, preposiciones y adverbios, como ocurre cuando decimos “en base a…”, por decir “con base en…”;“de acuerdo a…”, en lugar de decir “de acuerdo con…”; “en relación a…”, por decir “con relación a…”o bien: “en relación con…”; “qué te parece” por “cómo te parece”; “estamos al aire.” por: “estamos en el aire.”; (“vamos al aire” sí es correcto).

El equívoco es un vicio generado por un error de sintaxis: “Estoy confeccionando un traje para caballeros inarrugables.”; en lugar de “Estoy confeccionando un traje (de tela) inarrugable para caballeros.”; “Se venden cunas para niños de madera” por “Se venden cunas de madera” (obviamente para niños) Hace unos días vimos una información cuyo título decía: “Talleres para niños de ortografía y redacción” y a pesar de que era muy interesante, no la publicamos en nuestra cuenta de twitter (@manualoratoria) obedeciendo a nuestros parámetros éticos, según los cuales sólo publicamos artículos escritos por otras personas de manera íntegramente textual, incluidos los títulos, y con los créditos correspondientes.

Metátesis:
Cambio de lugar de algún sonido: Metereólogo en lugar de Meteorólogo, areopuerto por aeropuerto.

Cacofonía:
Es la reiteración desagradable de elementos acústicos de las palabras: “La culpabilidad del acusado quedó en evidencia con la sentencia dictada en la audiencia.”

Circunloquio:
Es el uso excesivo de palabras para expresar una idea simple, como la reciente moda de mencionar los géneros femenino y masculino en las frases, bajo el pretexto de no discriminar a la mujer (Vea nuestro artículo ¿Astronáutos? ¿reas? ¿estudiantas?)

Las muletillas:
Son palabras o frases cortas que una persona repite constantemente cuando habla, convirtiendo lo que debía ser una agradable tertulia en un completo martirio. Muletillas como “este”, “¿ve?” “la cual”, “el mismo”, “¿Sí?” y muchas más, perturban a los oyentes y hacer perder todo el interés del público en el mensaje del orador.

Pleonasmo y Reticencia: Son figuras del Pensamiento (Figuras Literarias) descritas en el artículo anterior y que mal utilizadas se convierten en vicios de dicción. El pleonasmo es el uso innecesario de vocablos en la frase. La reticencia se convierte en anacoluto, vicio que consiste en dejar incompletas frases que resultan incomprensibles.
Óscar Manuel Romero.

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